top of page

ENCUENTRA MI ESCONDITE




“Encuentra mi escondite, alcánzame si huyo” ¡Sí! es una canción y me acompañó durante mucho tiempo cuando sentía que todos los compromisos, expectativas e ideas que tenía me alcanzaban y simplemente parecía que no llegaba al tope de lo que esperaba.

Durante mucho tiempo huía de Dios, pensaba que todo lo que hacía no llegaba a la espiritualidad que yo imaginaba, y terminaba ignorando a Dios en mis pensamientos, dejando todo a medias y llena de frustración.

No sé si a ti te ha sucedido, puede ser una relación de noviazgo donde querían involucrar a Dios como primer lugar, una amistad, una empresa donde has querido honrar a Dios y todo se ha ido para otro lado, tu tiempo de oración, tu familia, entre muchas situaciones. Lo cierto es que ignorar a Dios resultó más doloroso que escapar, y no porque Dios estuviera enojado conmigo, lo más doloroso fue tener una idea equivocada del Padre de amor; comencé a cerrarme creyendo que Dios era como la experiencia que había tenido con la paternidad cuando era niña y poco a poco, aunque estaba en la iglesia estaba totalmente desconectada y viviendo una fachada que dolía mantener.

No sé si tú querida lectora has pasado por esto o lo estas pasando; lo cierto es que Dios no se enoja con una hija que tiene su alma sangrando, no tienes que esforzarte para que Dios te ame, Él te amó desde antes que nacieras: “antes que yo te formara en el seno materno, te conocí, y antes que nacieras, te consagré, te puse por profeta a las naciones.” Jeremías 5:1.

En este momento se me hace gracioso pensar que tenía un escondite, y es que no hay escondite tan oculto donde Dios no te pueda encontrar, incluso estoy segura que donde creemos ignorarlo Dios está esperando pacientemente a que nos rindamos, por que si algo me sacó del lugar en el que estaba fue rendirme y decirle a Dios: “necesito ayuda”.

Rompe el silencio por que este te traerá sanidad y cercanía con Dios, sal del lugar donde te has escondido, pues los escondites son lugares que el diablo preparó para llenarte de mentiras, quitarte la visión, el propósito y rodearte de depresión.

No olvides como es el corazón del Padre “El Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y está lleno de amor inagotable.Salmo 103:8, ¿leíste bien? Está LLENO DE AMOR INAGOTABLE, así que permíteme recordarte: Dios te ama y hay propósito en todo lo que estás pasando. No camines sola, pide ayuda, rodéate de personas que te ayuden a sanar; al final todos la necesitamos.

La próxima vez que quieras esconderte, escóndete en su perfecto amor que echa fuera el temor y no te lamentes por todo lo que has pasado. Recuerda que las promesas son eternas, pero las adversidades tienen fecha de vencimiento.


PD. ¿Recuerdas la canción del inicio? “Ven Señor, como dijiste, derrama tu gloria” pues prepárate para que la gloria del Padre sea derramada en ti, solo tienes que llamar.


Con cariño


Yese







 
 
 

Comments


©2024 por Entre Nosotras Project.

bottom of page