PENSAMIENTOS HECHOS NIDOS

Me gustaría iniciar preguntándote: ¿Has hospedado pensamientos en tu mente que ahora han formado un nido? Es decir, pensamientos que por mas que deseas sacar de ti, permanecen.

A principios de cada año, muchas de nosotras deseamos buscar la voluntad de Dios, una palabra y guía para caminar con visión y propósito. Aunque Dios habla y trae dirección, a lo largo del año, el camino que debemos atravesar no es como probablemente lo imaginamos. Los pensamientos de Dios son muy diferentes a los nuestros, y su manera de obrar es misteriosa, pero su palabra siempre se cumplirá.

Te ha pasado que le dices a Dios: “Señor, pero, ¿Cuánto más debo esperar? Yo creo que ya estoy lista para esto. He pasado por mucho y me siento lista para esto nuevo que me hablaste y te estoy pidiendo”

Yo le he dicho esto a Dios un par de veces y sí que he estado equivocada. Sólo Dios sabe cuándo estamos listas (no perfectas) para recibir aquella bendición, iniciar ese negocio, relación, dar ese paso o entrar en una nueva temporada en nuestras vidas.

En Efesios 3:20 dice que Dios tiene el poder para lograr mucho más de lo que podemos pedir o incluso imaginar, y sé que Él quiere darnos cosas buenas, pero es necesario transitar el camino. Allí, Dios nos mostrará el estado de nuestro corazón, aquellas heridas que aún siguen camufladas, las mentiras que hemos creído, los temores e inseguridades que hemos abrazado. Y justo allí, cuando entregamos el control y dejamos todo a los pies de Cristo, es cuando somos transformadas y sanadas. Entonces, estamos listas para ver el sí y amén de Dios (2 Corintios 1:20).

Si volvemos a la pregunta del inicio, debemos saber que el camino que tenemos que atravesar para el cumplimiento de cada palabra de Dios está rodeado de un campo minado de pensamientos que aparecen una y otra vez. Si nuestros pensamientos no perseveran en Cristo y en la verdad de su palabra, cualquier pensamiento contrario puede distraerte, desenfocarte y llevarte a perder la fe. Habrá pensamientos que te muestren todas tus incapacidades, te invadan de temor o te presenten los peores escenarios. Habrán pensamientos acompañados de fantasmas del pasado y te harán creer cada una de esas mentiras como una verdad acerca de ti. Se plantarán y formarán nido. ¿Qué está contemplando tu mente ahora mismo?

Querida amiga, es hora de limpiar la habitación de tu mente, abrir las puertas y ventanas y permitir que la luz de la palabra de tu buen Padre Dios entre a transformar todo pensamiento contrario a las verdades que Él dice de ti y quiere para ti.

Dios no necesita tus soluciones, Él es Dios.

Quiero invitarte a que le permitas a Dios ser Dios. Concentra tus pensamientos en tu buen Padre y pídele que tu mente sea transformada para que puedas conocer su voluntad, que es buena, agradable y perfecta (Romanos 12:2). Entonces, todo lo que Él ha hablado a tu vida se cumplirá en su tiempo.

Con amor,

Juli Escobar